El incombustible Pajuelo se hace con el "XIII Torneo Ciutat de Vinaròs"

RFETM
Martes 24 de julio de 2018 - 15:18

Otro año más, el sábado y el domingo de la primera semana de Julio, el Club Tennis  Taula Vinaròs ha organizado sus torneos después de las fiestas de Sant Joan y Sant Pere  en nuestra ciudad.

El sábado por la tarde se celebraron dos torneos simultáneamente, el “III Torneig Lliure Menut’’ para menores de 16 años, y el “V Torneig Lliure’’ para jugadores federados de la categoría más baja (3ª regional o provincial) y jugadores no federados de todas las edades, todos ellos con nivel de principiante o principiante avanzado.

En el “III Torneig Lliure Menut’’ destacó la presencia del que parece ser una gran promesa de este deporte, Raúl Linares (C.J. Ulldecona), consiguiendo el 1ª puesto, derrotando a Jaume Prades (C.J. Ulldecona) en la final y en una semifinal a Vlad Goncear (C.J. Ulldecona). Jaume había derrotado en la otra semifinal a Toni Oliver (CTT Santísimo Salvador de Onda). El trofeo al mejor jugador local ha sido para David Vizcarro (CTT Vinaròs) que cayó derrotado en cuartos por  Vlad Goncear.

En el “V Torneig Lliure’’ destacar la gran actuación de nuestro joven jugador Joan Fonollosa (CTT Vinaròs), quién parece haber dado un gran salto cualitativo de nivel técnico en los últimos meses y que se plantó en la final después de no haber jugado una fase de grupos a su mejor nivel, pero que después de tener que jugar una fase previa a los octavos de final, batió en éstos con sorprendente solvencia a un gran jugador, para este nivel de torneo, como es Ernest Estapé (CETT Els Mets); en cuartos derrotaría al joven jugador Alex Zaragozá, que aunque actualmente no pertenece a ningún club y no juega desde hace 2 o 3 años, se hizo como jugador en el CTT Vinaròs, apuntando las grandes maneras que aún así ha demostrado en el torneo a pesar de faltarle el ‘’tacto’’ y la precisión tan importantes en un deporte donde son tan decisivas estas cualidades. Alex derrotaría antes a un muy buen jugador joven como es Juan Fran (CTT Costa Azahar Castellón) y a Miguel Angel Companys (CTT Benicarló) veterano y difícil jugador que ha progresado mucho en los últimos años, a ambos con un marcador ajustadísimo.

Otro jugador que sorprendió es David Domingo Echeverría (CTT Tortosa), sobre todo al batir en cuarto de final de forma muy ajustada a un jugador ya veterano pero que ha hecho una gran progresión en los dos ulimos años como es Tengiz Dryev (CTT Tortosa), y en octavos a nuestro jugador Brad Targa (CTT Vinaròs), quien aunque no tuvo su día, en éste cruce perdió solo por 3-2. Ya en semifinales David caería derrotado por la revelación del torneo, ‘’nuestro’’ Joan Fonollosa.

En la final Joan no podría con Nazario García (CTT Tortosa), en otros tiempos jugador de mucho nivel que dejó el tenis de mesa durante años y que ha vuelto a este deporte. Aún así Joan se lo pondría muy difícil, siendo derrotado por 3-1 pero con puntos muy disputados.

El domingo se celebró el “XIII Torneig Ciutat de Vinaròs”, torneo federativo y de más alto nivel, que contó con la participación de Jose Carlos Guillot (1ª Nacional de la Comunidad de Valencia) y que fue la revelación el año anterior siendo 2° con 14 años, repetiría este año, pero esta vez como gran favorito pues no había un jugador de la categoría de División de Honor como el ganador del 2017.

Guillot derrotaría sucesivamente a David Chelly (CTT Paterna) en octavos, jugador veterano y dificilísimo con gomas de "picos" en ambas caras de la raqueta, que a su vez se había deshecho de Rafa Zaragozá (CTT Vinaròs) y del muy buen jugador Jorge Boscá (CTT Costa de Azahar); en cuartos a Josep Rodríguez (Club Gimnastic), otro " veteranísimo" con picos y de tambien muy dificil juego que hizo un extraordinario torneo; en semifinales Guillot tendría que vencer a un Juan Carlos Muñoz (CTT Tortosa) estelar, que había ganado en octavos al buen jugador Miguel Ayora (CTT Tortosa) y,sorprendentemente y con mucha autoridad, en cuartos al varias veces vencedor de este torneo Jaume Querol (CTT Tortosa).   

Por la otra banda del torneo llegó a la final el incombustible Pajuelo, que ganaría sucesivamente a otros dos veteranos con picos, Ferrán Perearnau (Club Gimnastic) en octavos, y a Joaquin Azcon (CTT Cardedeu) en cuartos, cada uno con su estilo muy definido, especialmente Azcon con unos golpes que ralentizan el juego normalmente rapidísimo del tenis de mesa; en semifinales Pajuelo tendría que derrotar y con muchas dificultades al principio de la partida a Carlos Ron, ganador el año pasado del torneo Lliure, torneo que pudo jugar por no estar federado tras pasar por una lesión importante. Esta vez ya federado en la preferente de Madrid, demostró sus cualidades (entre ellas un gran servicio) al derrotar a otros dos jugadores con picos, el veterano Vicent Vidal (Santísimo Salvador Onda) en cuartos y que a su vez había vencido inesperadamente a Francisco Zaragozá (CTT Vinaròs); el otro fue el joven senior Didac Sánchez (CTT Vilafranca), cada vez mejor jugador y más potente de piernas pero que no encontró la forma de hacerle frente. También hay q hacer notar que batió a José Ignacio Iranzo (CTT Costa de Azahar), jugador ya veterano o casi que en los dos últimos años ha progresado en gran manera, sobre todo en un revés de bloqueo y agresivo al mismo tiempo casi infranqueable.

La final estaba servida: J. Pajuelo (Reus Deportiu) contra J.C. Guillot (Chema Tenis de Mesa). El año anterior Guillot venció inesperadamente, aunque por la mínima, a un sorprendido Pajuelo y siendo Guillot un jugador no tan pulido como ahora, pero con la ventaja de la falta de presión para ganar. Sin embargo, esta vez Guillot parecía el favorito, mucho más jugador que hace un año, con mejor revés atacante para iniciar el ataque sobre pelotas lentas con poco bote o no excesivamente cortadas, y en el primer juego le salió bien. Pajuelo se veía apabullado por el topspin de derecha y casi solo jugaba a la contra desde lejos de la mesa, y cuando iniciaba el ataque, Guillot le contraatacaba con más fuerza y movilidad de piernas, con lo que volvía a defenderse casi exclusivamente. Pero todo cambió en el segundo juego y Pajuelo empezó a mandar pelotas no rápidas pero con mucho liftado de topspin de revés, con lo que se dio cuenta de que Guillot ya no tenía precisión si atacaba con potencia porque el liftado da irregularidad al bote de la pelota. Y así se puso 2-1 por delante Pajuelo, Guillot arriesgó más en sus ataques y empató a 2-2, y en el juego definitivo Guillot se puso por delante pero Pajuelo con frialdad remontó, tuvo pelota de partido, después la tuvo Guillot, y finalmente creo que Guillot tuvo miedo de perder en el último punto, y perdió como casi siempre sucede que llega ese miedo. El grito de Pajuelo al ganar el último tanto revela toda la tensión contenida y bien gestionada que Josep llevaba dentro y que ya era hora de expulsar. 

Esta web utiliza cookies para obtener datos estadísticos de la navegación de sus usuarios. Si continúas navegando consideramos que aceptas su uso. Más información